Los hipster y sus barbas

La barba hipster está de moda. Seguro que conocéis a más de uno que os ha sorprendido dejándose una. Atrás han quedado aquellos días de machos sin pelo en pecho, días en los que las maquinillas de afeitar hacían el agosto con el apurado más perfecto que existía. Época en la que las marcas de afeitado competían por lanzar maquinillas con el mayor número de cuchillas, ¿para qué? Pues para nada, ahora lo que se lleva es macho de pelo en pecho. La barba es el nuevo bigote de los Hipsters, así que, es lo que toca. 

No puede ser más cómoda, ahora lo que se lleva es la barba. Atrás han quedado aquellos días de afeitado máximo. Ahora las marcas de cuchillas se pueden poner manos a la obra con las maquinillas para recortar la barba, que oye, hay que hacer lo que dicte el mercado. Y la demanda es la que manda. 

Recortadas, salvajes, negras, rubias, pelirrojas, el caso es llevar barba y cuanto más poblada sea mejor. Cuando hablamos de barba hipster hablamos de una barba poblada, rizada y algo descuidada. Y se califica "hipster" porque esta tribu urbana de nuevos modernos se caracteriza por llevarla. ¿Y qué piensan ellas sobre esta moda? ¿Están a favor de los chicos con barba o en contra? Hemos de reconocer que gran parte de esos votos a favor se deben a modelos como Christian Göran que han hecho de la barba un "must" pese a todos los adeptos que aún siguen al bigote. 

Es decir, además de los hispter donde se utiliza mucho esta barba es en modelos de pasarela y publicidad como Christian Göran por lo que se lleva tanto. ¿O acaso no os habéis dado cuenta de la moda de las barbas en la publicidad? Sin duda la barba más popular es la del modelo que os he comentado antes. A lo mejor su nombre no os dice nada pero si os digo "la barba trivago" seguro que ahora sabéis de quien os hablo. Este modelo sueco nacido el 7 de abril de 1982 se ha hecho muy popular gracias al anuncio y sobre todo a su barba hipster. Desde que "el barbas" de Triavago hiciese su estelar aparición televisiva, el mundo no ha vuelto a ser el mismo. Christian Göran solo era la punta (barbuda) del iceberg, una constatación de aquello de que el hombre y el oso, cuanto más peludo, más hermoso. 

En cuanto a la cultura hipster, es una subcultura asociada en mayor medida con la música independiente. Se caracteriza por una sensibilidad variada, alejada de las corrientes culturales predominantes (mainstream) y afín a estilos de vida alternativos. El interés por los medios de comunicación incluiría películas de cine independiente, revistas como Vice y sitios oficiales como Pitchfork Media. 

Hipster es una persona que se enmarca en cierta moda actual a su propia personalidad, tendiendo a un amor pseudo intelectual por la cultura en general, principalmente por música alternativa, cine independiente y géneros ampliamente reconocidos por su gran atractivo artístico, pero con un menor toque comercial que los más conocidos.

Un hipster es, por decisión propia, alguien que defiende la multiculturalidad, por tanto su exponente rebelde como el de los hippies originales prácticamente ha desparecido. No obstante, tiene reminiscencias del pasado, adorando todo lo retro y vintage que ya ha sido descartado por las modas actuales y adaptándolo a las nuevas tendencias (sombreros, bufandas, gafas de pasta...).

Su versatilidad es tanto cultural como sexual. Un hombre hipster lleva con elegancia desde bolsos hasta prendas de seda para el cuello, sin por ello estar defendiendo una postura sexual ambigua. 

La definición de hipster, dada su reciente creación, todavía está pendiente. Pero ya hay quien lo vincula a una evolución del fenómenos cool unido al del yuppie. Una persona con ambas características, la de estar fresco culturalmente hablando, como la de estar a la última en moda y tendencias, sería lo más aproximado a alguien que se podría denominar hipster.